Enfrentamientos entre chapacos y chaqueños en Bolivia

Urgente: Recrudecen los enfrentamientos entre militantes chapacos y pobladores chaqueños en Tarija, por autonomías.

Gentileza "Semanario Oriente Boliviano"

Zapatera, (Gran Chaco, Tarija, Bolivia)/29 de marzo de 2008.
En Sanandita y Zapatera (provincia Gran Chaco) y en Chiquiaca (provincia O'connor), se produjeron empujones, golpes y amenazas con machete en mano, entre pobladores mestizos chaqueños que aliados a avá (chiriguanos), se cruzaron con militantes chapacos pro-autonomía de Tarija.
El párroco local intervino, mediando entre las partes, y la sangre no llegó al río, por suerte.
Los militantes chapacos acusan a los guaraníes y otros chaqueños de sabotear el proyecto de estatuto autonómico de Tarija, al reclamar la separación de dos provincias orientales tarijeñas (Gran Chaco y O'connor y el municipio de Tariquia) para formar junto a 2 provincias chuquisaqueñas y la Cordillera de Santa Cruz, el llamado "décimo departamento boliviano llamado Chaco o Gran Chaco".
El dirigente chaqueño Fermín Yagua le dijo a Semanario Oriente, que "no retrocederemos en la creación de nuestro departamento Chaco para la Nación Guaraní y otros pobladores. Queremos compartir los recursos de nuestro subsuelo petrolero con el estado boliviano, buscando reparación y justicia para nuestra gente, dentro de la Ley Marco de Autonomías. No nos arrastrarán fuera de Bolivia, para caer dentro del estado racista camba que pretende crear Brancobi. Que no se olviden que somos avá iyambaé (la gente sin dueño), y que le dimos guerra a Santa Cruz, Sucre y Tarija por más de 30o años, hasta que se produjo la masacre de Kuruyuqui donde casi nos hicieron desaparecer.
Por su parte Isidoro Ipatí agregó: Si Tarija quiere ser un país aparte, no será con nuestro petróleo".
Yolanda Maguna comentó: Queremos ser el Departamento Chaco, para que se cumpla la autonomía indígena que habilitó la Constitución Política del Estado. El cura itinerante de Zapatera, el padre Fulbio Huanca, logró que los militates chapacos se retiren en sus caballos, y que los guaraníes guarden sus machetes, pero no se puede asegurar que el conflicto no se vuelva a producir.
Huanca pidió que la policía boliviana tenga una presencia más fuerte en el lugar, para evitar enfrentamientos y sobre todo derramamiento de sangre.